lunes, 28 de febrero de 2011

Periodismo sin periodistas y periodistas sin Periodismo

"En palabras de Elsa González, presidenta de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), "la crisis es de los empresarios de la comunicación, que no han sabido adaptarse a los nuevos tiempos y a las nuevas tecnologías, no de los periodistas. Y ahora lo pagamos nosotros". Una asistente remató ese planteamiento con una afirmación: "Qué paradoja: hay un periodismo sin periodistas y periodistas sin periodismo".

Este texto está extraido de la web de la Asociación de Periodistas de Madrid (APM) donde se han ido dando los resúmenes de las jornadas que han formado parte del Laboratorio de Periodismo organizado por la APM. En concreto esta intervención se hizo en la cuarta de las jornadas, donde se trataba cómo conseguir cobrar por los contenidos informativos en Internet.

Las frases fuera de contexto suelen ser engañosas. No obstante, aunque también soy de la opinión de responsabilizar en primer lugar a las empresas de comunicación sobre esta crisis que vive nuestra profesión y que es incluso anterior a la actual crisis económica, no lo estoy tanto en la razón que esgrime la presidenta de la FEPE, esto es, que las compañías periodísticas no hayan sabido adaptarse. En todo caso, su responsabilidad sería (y es) no encontrar un modelo económico exitoso para obtener rentabilidad a través de Internet. Lo que sí es cierto es que esa laguna financiera la estamos pagando nosotros, los periodistas y que, en última instancia ha provocado que exista un Periodismo sin periodistas y periodistas sin Periodismo.

sábado, 26 de febrero de 2011

Cuando no todo vale

Medios de comunicación haciendo de tribunales de justicia. Ejemplo, el programa de Ana Rosa Quintana arrancando en directo la confesión de culpabilidad a Isabel García, esposa de Santiago del Valle y supuesta encubridora del asesinato u homicidio de la niña malagueña.

Periodistas haciendo de policías o de ladrones, utilizando documentos e identidades falsas para colarse en la residencia de la reina de Inglaterra y así denunciar el sistema de seguridad que la protege. Periodistas con doble titulación; por ejemplo Derecho, para colarse en una prisión haciendose pasar por el abogado defensor de un acusado de asesinato y pederasta y conseguir una entrevista en exclusiva.

Hoy en la edición digital de El Mundo tratan el primero de estos sucesos, el ocurrido en el programa de AR. El redactor escoge muy bien el inicio de su crónica y hace referencia a la gran comedia cinematográfica Primera Plana, dirigida por el gran Billy Wilder en 1974. Un condenado en el pasillo de la muerte logra escaparse horas antes de la ejecución. Le acompañan Jack Lemmon, periodista brillante con mucha prisa por cubrir esa información ya que está a punto de contraer matrimonio, y un jefe  sin escrúpulos, interpretado por Walter Matthau. Ambos esconden al reo de sus colegas y de la justicia para obtener una entrevista en exclusiva. El delincuente resulta ser inocente, pero su inocencia no interesa porque no vende.

Cuando era profesor universitario y comenzaron a aparecer de forma reiterada en los medios de comunicación este tipo de prácticas comencé a proyectar este film para ejemplificar cómo ya hacía 30 años nuestra profesión se debatía en dónde estaba la ética y deontología y si el fin justifica los medios para conseguir una exclusiva.

viernes, 25 de febrero de 2011

El nuevo ecosistema informativo

Ayer por la tarde, 24 de febrero de 2011, tuvo lugar una manifestación de periodistas del grupo PRISA en la Gran Vía madrileña. Fue convocada por los sindicatos que llevan la negociación con la empresa, y en ella estaban algunos de los 2.500 afectados por los EREs anunciados y una buena parte de sus compañeros todavía no contaminados por los expedientes reguladores.

Pocas horas antes Juan Luis Cebrián participaba en un acto donde instaba a la clase periodística a que se adaptara al nuevo ecosistema informativo. En prensa escrita, las grandes cabeceras parecen coincidir en este punto, diario ABC y, antes incluso, el diario El Mundo ya anunciaban la deseada y obligatoria llegada del periodista multimedia.

Un periodista capaz de cubrir una información para, por ejemplo, un periódico impreso y con conocimientos suficientes que le permitan grabar un vídeo sobre el acontecimiento, editarlo y subirlo a la versión digital de su medio con un texto adaptado, más breve, con enlaces, al medio digital. Un periodista que, permitidme la broma, llevado al extremo puede llegar a tener la apariencia de Caracortada, la presentadora de televisión de la película "Kika", de Pedro Almodóvar.

Cuando yo trabajaba en el diario El Mundo se logró que la empresa pagara una paga extra a los trabajadores para compensar que utilizaran sus textos del periódico impreso como contenidos del digital. Ahora no sé si lo que se pretende es que la misma plantilla asuma dos trabajos por el salario de uno o la adaptación real a este nuevo ecosistema informativo al que hace referencia Cebrián.

jueves, 24 de febrero de 2011

Debate sobre el futuro del periodismo

Los directores de la coalición informativa ('El PAÍS', 'The New York Times', 'Le Monde', 'The Guardian' y 'Der Spiegel') nacida a raíz de la publicación de los papeles de Wikileaks debaten en Madrid sobre el futuro del periodismo.

Bill Keller, director de The New York Times: "La única industria que cierra periódicos es la industria periodística. El futuro es online".

Yo iría más allá del debate sobre si el futuro del periodismo pasa por Internet. El futuro de nuestra profesión pasa por la empresa periodística, sea cual sea su soporte, y en su afan por nombrar o convertir a los directores de los medios en empresarios con bonus. Y donde para cuadrar balances prefieren prescindir de los profesionales con más experiencia y criterio para sustituirlos por becarios con contratos y sueldos en precario.

Algo similar ocurre en las universidades, donde en el currículo de un candidato a rector pesa más que haya pasado por la gerencia de una gran compañía, mejor una multinacional, y que entre sus haberes esté el discutible mérito de haber gestionado una brutal reconversión con ERE incluido, multitudinario a ser posible, pesa más digo, que su experiencia académica e investigadora. Con los profesores ocurre más de lo mismo, en lugar de cuidar a aquellos con mayor bagaje y conocimientos, los sustituyen por recién licenciados, eso sí más sumisos y muchísimo más baratos.

Grado en Periodismo

Cuando digo que debemos subir el nivel de exigencia en torno al mundo del periodismo, lo hago refiriendome tanto a las condiciones económicas y laborales que ofrecen las empresas como a la formación que deben aportar las distintas universidades donde se cursa Periodismo porque, al final, la suma de ambos nos lleva a determinar el nivel de desarrollo de los profesionales y de la profesión.

Hoy estaba revisando el plan de estudios que ofrece la Universitat Internacional de Catalunya para cursar su Grado de Periodismo. Entre otras, en su sitio web dan como ejemplos de posibles salidas profesionales las siguientes opciones:

  • Redactor de información periodística en cualquier medio de comunicación: televisión, radio, prensa, revistas, Internet, etc. La verdad, no sé qué diferencia hay entre prensa y revistas; en cuanto al "etcétera" quizá quieran dejar abierta la posibilidad del envío de información vía holograma.


  • Coolhunting (caza de tendencias). No sé si sólo me lo parece a mí, pero este palabro anglosajón debería ser una referencia de posible salida profesional para estudiantes de Marketing, no de Periodismo.


  • Profesional ENG. ENG, si hay alguien que me lo pueda explicar se lo agradecería infinito


  • Comunicación en el sector de la moda y las tendencias ¿Por qué de todas las opciones posibles se ha elegido la moda y, de nuevo, se hace referencia a las tendencias? Creo que la respuesta está en que la persona que ha redactado estas salidas profesionales procede del mundo del Marketing y aunque no conoce demasiado en profundidad el del Periodismo es muy cool, hunting, ENG y por supuesto está a la última en moda y tendencias.
  • miércoles, 23 de febrero de 2011

    Se busca periodista "dispuesto a dejarse la piel"

    "Buscamos un profesional dinámico con titulación superior en Ciencas de la Comunicación, para llevar la comunicación de una empresa tecnológica en pleno auge, dispuesto a "dejarse la piel" para hacer llegar noticias a todos los rincones (notas de prensa), tener presencia continuada en redes sociales como FaceBook, Twitter, Second Life, etc. confeccionar "Case Study" y confeccionar los artículos de la revista interna de la empresa de difusión nacional, manatener el catálogo de artículos online y mantener una estrecha relación con los medios especializados."

    "Carnet de conducir, dominio de las redes sociales (FaceBook, Twitter ...), control avanzado de programas de maquetación InDesign y Photoshop de Adobe, Licenciado/a en Periodismo, experiencia en agencia de medios, redacción de noticias, etc. y con trabajos/artículos publicados (demostrable). Incorporación a empresa sólida con difusión nacional para hacerse responsable de la Comunicación integral de la empresa en medios propios, ajenos y ONLINE. Nivel de inglés, First Certificate. Se valorará experiencia como periodista en temas técnicos e informáticos".

    Así reza literalmente (con sus erratas incluidas) una de las ofertas de trabajo de Infojobs publicada hoy, 23 de febrero de 2011.  Se busca a un responsable de comunicación. Periodista dispuesto a dejarse la piel. Eso sí, más abajo se puede leer que el contrato es de seis meses y el salario de 18.000 euros brutos al año. Menos mal, sólo hay que dejarse la piel a jirones durante un semestre. Pido a los responsables de Greenpeace que incluyan cuanto antes al periodista como animal a proteger o terminaremos despellejados vivos como las pobres focas.

    El paro y las oportunidades de trabajo

    Como otros muchos colegas de profesión estoy sin trabajo. En estos casos uno suele recurrir en primera instancia a tus amigos y compañeros, aquellos que mejor te conocen, a ti y tu trabajo. Poco a poco y según te cuentan algo que ya sabes muy bien: la situación actual del sector, que acaban de salvarse por los pelos de alguno de los EREs que han llevado a cabo en su empresa o que temen caer en los que ya están anunciados..., quedan en estar al tanto de si se produce alguna novedad.

    Luego nos queda redactar nuestro currículo, enviarlo a todos los medios en los que creas puedes encajar y darte de alta en portales como Infojobs o Periodistas.com. Introducir nuestro currículo, crear una alerta para que nos avisen de determinadas ofertas. Ay, ingenuos. Cuando recibes la alerta y te inscribes en la oferta ya aparecen cientos de candidatos apuntados. Te sugieren que pagues para hacerte usuario premium y aparecer entre los primeros puestos o que abones aún un poco más para demostrar un especial interés por la empresa que oferta el puesto de trabajo.

    Introducción a los periodistas.com

    Ser periodista y tener trabajo no es fácil en estos tiempos que corren. Si, además, tu especialización es la tecnología el problema se agrava. En este país los medios de comunicación casi nunca han prestado gran atención, ni espacio, al seguimiento serio y diario que ese sector se merece.

    Sólo durante la década de los noventa el sector tecnológico gozó de buena salud entre la prensa. El boom de la microinformática sirvió de caldo de cultivo para, primero, la aparición de editoriales técnicas y; segundo, la incorporación y aceptación de este nuevo mundo (con sus pujantes y deseadas campañas publicitarias) en las cabeceras de la prensa tradicional, primero de los diarios económicos y después del resto de periódicos.

    La burbuja de las puntocom y el bajón publicitario de las marcas tecnológicas se encargarían de hacer retroceder el interés de los medios por este sector y, por ende, significó el comienzo de la caída de las expectativas de los profesionales del periodismo especializados en este mundo.

    Así fue como perdí mi último trabajo en prensa escrita, en el suplemento "Ariadna" editado por el diario El Mundo. De ahí recalé en las profundas aguas de la Universidad, durante tres años fui profesor en la Facultad de Comunicación y Humanidades de una universidad privada y dirigí el periódico institucional de esa entidad. Fíjate que durante esos años de docencia obligaba a todos mis alumnos a crear y mantener un blog. Les decía que formaba parte del futuro de la profesión y que debíian acostumbrarse. Ahora, varios años después de este consejo quiero predicar con el ejemplo.